Sin duda, el radar es uno de los elementos más importantes en la equipación de un barco. Hoy en día su uso transciende a su tradicional utilidad para detectar objetos a una determinada distancia de la embarcación.
Desde la aparición de la tecnología de compresión de pulsos por banda ancha, los radares se han convertido en un magnífico instrumento de navegación y una gran ayuda también para la pesca deportiva. Los actuales radares se integran en el conjunto de instrumentos del barco. Combinan la información ofrecida con cartografía de un extraordinario nivel de precisión e imágenes de alta resolución. La imagen puede reproducirse en una pantalla multifunción y la información puede ir almacenándose para consultarse en otro momento, permitiendo comparativas históricas. También se complementan a la perfección con los sistemas de posicionamiento dinámico o los sistemas de atraque asistido.
Esta tecnología de banda ancha transmite la señal por un cable de red a la pantalla o mediante wifi a un ordenador o un dispositivo móvil. Las ventajas del gran avance que se ha producido en la última década son múltiples:
MAYOR SEGURIDAD
No solo permiten calcular la distancia a un objeto sino también su velocidad de movimiento, lo que resulta vital para evitar colisiones.
MAYOR PRECISIÓN
Tienen la capacidad para detectar señales débiles. Esto resulta especialmente útil en la pesca deportiva, ya que detecta la presencia de aves, lo que indica la localización de un banco de peces.
ANTENAS MÁS PEQUEÑAS Y FÁCILES DE INSTALAR
El alcance del radar depende no solo de la potencia de emisión sino también de la altura a la que se coloca la antena. Los radares de compresión de pulsos requieren antenas más pequeñas para la misma potencia de emisión. Además, tanto las nuevas antenas de haz como las de radomo (circulares) captan y transmiten mejor la señal a baja altura de instalación, lo que favorece que embarcaciones de recreo a motor medianas y pequeñas puedan beneficiarse de radares con muy buen alcance. Por ejemplo, una antena de radar Raymarine de radomo de apenas 9,5 kg de peso ofrece un alcance de hasta 48 millas.
En cualquier caso, la oferta es amplísima y es muy conveniente analizar las características de su embarcación y el uso que habitualmente hace de ella para seleccionar la mejor solución. En Motonáutica Sanpol somos especialistas también en radares náuticos, GPS e instrumentación náutica y contamos con técnicos cualificados para su instalación.